Casa tradicional situada en el centro histórico de la ciudad. La intervención arquitectónica se centra en el ámbito de planta baja, especialmente la zona de acceso y cocina, cubriendo una superficie total de 85 metros cuadrados. Los muebles de cocina y el diseño general toman como modelo el estilo tradicional de cocina burguesa de principios de siglo pasado, siguiendo un estilo minimalista definido por detalles simples, así como materiales y colores cálidos. Los distintos accesorios han sido seleccionados de manera precisa para fundirse con los muebles sobre los que se aplican, encajando perfectamente dentro de la línea general de diseño. En la zona de entrada han sido expuestos diversos elementos constructivos originales y puestos en valor, tales como un muro de carga portante de cierta antigüedad elaborado con la técnica del tapial. El falso techo preexistente ha sido retirado para hacer visible la estructura original de forjado tradicional ejecutado con vigas de madera y revoltones.  El pavimento ha sido resuelto con una cálida textura de madera,  logrando un balance entre tradición y modernidad.

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Arquitectura: atelierREIG

Diseño interior: atelierREIG

Fotografía: Jordi Mollà